sábado, 29 de octubre de 2011

Insomnio matutino

Últimamente me está pasando algo nuevo: siento nostalgia por cosas, situaciones  o personas de las que aún no me he desprendido; y  lo más raro:  por cosas, situaciones o personas que nunca he experimentado o sentido...
Las cholas. Me cuesta no ponérmelas.  Anoche por ejemplo di un paseo  de esos para calmar un poco la ansiedad,  y cuando me percaté, llevaba bufanda y cholas. Es absurdo:  bufanda para abrigar mi cuello, y los pies al aire... Pienso en ellas y  ya echo de menos usarlas para salir a la calle en cualquier momento (aunque llueva un poco).

(Nota. El primer número del fanzine va a tratar sobre esa sensación: La nostalgia)

Cuando era muy pequeña, recuerdo que varios veranos seguidos, en la misma playa a la que iba siempre, estaba el mismo chico con la misma colchoneta (unos cuantos veranos, la verdad). Lo miraba desde mi toalla a lo lejos bañándose, y siempre fantaseaba con él. En realidad eran ensoñaciones ingenuas: me visualizaba jugando con él en el agua, nadando...años después, dándole un beso (sin lengua)... Recreaba imágenes en mi mente en esos veranos, y en algunas -por no decir muchas-, casi siempre acababa apareciendo él. Nunca me acerqué. Nunca lo conocí. Nunca hice nada. Pero todavía lo recuerdo.
(Recordar los recuerdos de cosas imaginarias: ay, serán estas horas, pero creo que estoy fatal...)

Ahora me está pasando. En estos días previos al cambio. Echo de menos un súper móvil que me podían haber prestado para grabar la segunda parte de " de constru-idos". Echo de menos la "sole-daridad" ocurrida en este espacio -casual o causalmente ( porque todavía no entiendo nada de lo que pasó)-  y echo de menos el recuerdo de las ficciones mentales sobre un desenlace imaginario que nunca llegó a ocurrir...




3 comentarios:

  1. La amalgama de aparentes contradicciones es la síntesis del ser humano...

    ResponderEliminar
  2. Tienes razón: "aparentes contradicciones". A veces las apariencias son engañosas, y también las paradojas (aunque sean ciertas...)
    Gracias por pasarte

    ResponderEliminar
  3. Yo creo que, más bien, las apariencias rara vez no son engañosas. Todos escondemos un lado oscuro; aunque el de algunos es más preocupante que otros...

    Un placer venir a hacer una visita

    ResponderEliminar