domingo, 30 de octubre de 2011

¿Dónde van los besos que no damos?

Tú, soberano de la nada (hoy te has lucido).Tu puñetera falsa lealtad, tu hipotética autenticidad, tus patéticas adulaciones... 
Eres una mentira y yo soy una idiota por haber creído en ti tanto tiempo. He malgastado mi incondicionalidad por confíar en que te conocía bien. Jódete, gilipollas, soberano de la nada, jódete, jódete, finalmente has conseguido desaparecer de mi mapa. Y si no es lo que querías: jódete (igual que nos jodemos todos por otras cosas). La verdad es que hoy te has lucido como nunca... (o como siempre).
¿Me preguntas dónde van los besos que no damos?: ..pues a la mierda, imbécil. 
Definitivamente ahora no quiero saber nada de la raza humana, una vez más me siento decepcionada, una vez más me reafirmo en la necesidad de soledad.
Por suerte esta noche cuento con el préstamo de Lluvia que me mira y se muere por que le de permiso para subirse a la cama. Por suerte ninguna noche más dormiré con tu compañía.
                                                                                                                                                          
(...por suerte hoy sólo quiero no quererte...)                           


3 comentarios:

  1. Buf, vaya entradita... desde mi absoluto desconocimiento, sólo puedo decirte: ¡ánimo!

    Desgraciadamente, la raza humana está demasiado extendida como para que puedas librarte de ella. Sorry...

    ResponderEliminar
  2. Instante de debilidad: después reflexión, asimilación y hoy, menos peso en la mochila...
    Gracias..

    ResponderEliminar
  3. vaya joyita!espero que se lo merezca sea quien sea..

    ResponderEliminar