sábado, 11 de junio de 2011

Abandono la huida hacia delante



Hoy me lanzo al vacío... se acabó. Por fin salgo del coma y empiezo a mover los dedos de los pies. Una vez más me analizo desnuda y resucito: una vez más los tatuajes que la vida me ha impuesto me recuerdan que soy capaz de todo. No hay prisa, no es necesaria. Poco a poco podré levantarme de la cama y caminar. Saldré a la superficie... sola (como tantas veces). Si doy un paso atrás sólo será para coger impulso. Ya está: hoy es  una oportunidad más.

(...no necesito tu aliento para ser más fuerte...)